El sorteo da el pistoletazo a la fiestas de navidad. Pero es un día raro, una mezcla de ilusión, frustración, rabia, que acaba en hartazgo y empacho por la suerte de los demás. Enumero:
1.- Durante la transmisión, los medios de comunicación dicen las mismas gilipolleces (lo digo de buena tinta que a mí el año pasado me tocó vivirlo en la redacción):
1.1.- "Hemos visto como introducían en el bombo el número que jugamos en la redacción";
1.2.- cuentan siempre la historia de uno de los niños, que es enternecedora;
1.3.- narran como la gente se pone a hacer cola en el salón de lotería para entrar a ver el espectáculo;
1.4.- cuentan la historia del sorteo, que es la misma que el año pasado;
1.5.- harán un repaso a los números más vendidos: "este año han triunfado el de la fecha de la final de la Eurocopa, y el número de Carlos Fabra";
1.6.- buscan a los más friquis en el salón del sorteo, incluido el que se forra con los 100 números que juega, el que va disfrazado de torero, de bombero o de lo que saliera del moño esa mañana;
1.7.- tampoco faltan las monjas y las anécdotas de sorteos de otros años;
1.8.- mientras sale el cabrón del Gordo, las radios abren los micrófonos a sus oyentes para preguntarles: "¿Qué van a hacer si les toca el Gordo?";
1.9.- empezarán a conometrar la jugada: "Este Gordo ha sido, por tres segundos, el decimotercero más tempranero de la historia";
1.10.- y para no perder audiencia una vez salga el dichoso numerito -- nótese que manía le tengo porque insisto en que a mi no me toca nada, y tengo el 95 % de posibilidades de que así sea -- dirán: "aún nos queda que repartir los cuartos y quintos premios"...¡menudo consuelo!
2.- Los informativos son calcados un año a otro:
2.1.- Gente feliz, muy feliz, regandose con cava, champán o sidra, porque dicen que han salido de pobres;
2.2.- entre ellos siempre hay una señora mayor que dice: "Ayyyy...llevo cinco euros...no es mucho, pero sirve para tapar augeritos"; f
2.3.- también está él que el cava no lo ha tirado al suelo y se lo ha bebido, con lo que ya está totalmente borracho y no para de agitarse para salir en la cámara;
2.4 .- en éste año los periodistas vamos a buscar las historias de los premios relacionados con la crisis: "Villarriba de Castañeda está de enhorabuena: el Gordo ha caído en esta localidad castigada por la crisis, en la que han cerrado las tres fábricas de aceitunas rellenas...". Pero será fácil: a cualquiera que le toque va a esgrimir la pésima situación económica para justificar la potra que ha tenido;
2.5.- Doña Manolita, la Brujita de Oro, y unas cuantas adminstraciones más volverán a decir que han vendido no sé cuantos premios. Esto también tiene su truco: venden muchos números. Pero año tras año la gente sigue acudiendo a estos sitios por si acaso; en unas horas, tiene su publicidad gratuita.
2.6.- aunque siempre se cuela algún lotero humilde que ha vendido por primera vez un premio, y va y dice: "No, yo no llevaba nada del número...No podemos jugar todos los números que vendemos...";
2.7.- "El Gordo ha estado muy repartido: se ha vendido en 12 comunidades autónomas" o "la suerte se ha concentrado íntegramente en Ceuta, donde se ha vendido íntegramente el Gordo" o "más de la mitad de los décimos de este Gordo fueron devueltos a Loteria Nacional, al ser un número feo".
3. La resaca dura un par de días, con historias como:
3.1.- El idiota que ha metido a lavar el décimo premiado en el bolsillo del pantalón vaquero; el que lo ha perdido o le han robado el boleto;
3.2.- El torpe que no ha comprado el número que juegan todos en su trabajo;
3.3.- Al que la vida no le va a cambiar por el Gordo: siempre hay algún sobrado que encima tiene le toca el Gordo;
3.4.- El orgulloso comercial de los concesionarios de BMW en Villarriba de Castañeda saldrá diciendo que ya no le queda ningún coche y que ha vendido 30 deportivos en 12 horas;
3.5.- "Si no han tenido suerte en el Gordo, aún les queda el Niño": la puntilla del hartazgo mediático.
Con todo este percal, el único día del año que huyo de la radio y la televisión es éste. Para ver si me ha tocado entro en el periódico y tecleo sin cesar los numerajos que llevo para concluir: "éste año tampoco".
Por cierto, lo que más me gusta de éste Gordo es la música del anuncio, con si historia muy de estos tiempos: un adolescente que compone una canción, la sube a youtube, a su myspace, y de allí a que se fije una agencia, pues es como si le hubiera tocado el Gordo:
PS: Si me toca seré discreto y no se lo restregaré a nadie en el telediario de las tres de la tarde.