Qué mejor manera para anunciar un bolígrafo que usándolo para hacer retratos. Así lo hace la empresa india Rotomac.
Vía Ziza.ru
martes, 30 de enero de 2007
De exámenes, estudios y ligoteo via bluetooth
Está todo el mundo universitario de exámenes, quejándose de vicio, cuando siempre está el remedio de una buena chuleta.
Mi amigo Pablo se va a la bibliteca a estudiar. Yo nunca pude - ni puedo - estudiar en una biblioteca. La razón muy sencilla: me distraía con todo, y más de una vez terminé leyendo libros que nada tenían que ver con el examen, paseando por las revistas y periódicos, o intentando cazar la mirada de alguna compañera de estudio. He de decir que nunca tuve éxito en estas lides. Creo que de haberlo tenido, aún hoy seguiría yendo a estudiar - quise decir ligar - a una biblioteca. Bueno, no, porque eso de madrugar para coger sitio me parece una soberana gilipollez, por mucho que te puedas ligar a la mujer de tu vida ¡Anda que no se estudia bien desde casa! Eso si, ando despistado porque ya no se puede hacer una pausa con Maria Teresa, que eso tenía su aquel...
Decía que mi amigo Pablo se va a estudiar a la biblioteca. Allí se ha encontrado con un cartelito pidiendo a ciertas feminas que dejen de llevar tacones. Dejando de lado los problemas de convivencia que causa los tacones, lo que me ha llamado, tal y como te comenté, amigo Pablo, es que tengas el bluetooth enchufado, "por si acaso". Sospechó yo que el Bluetooth es para que se pueda ligar con la que está dos asientos más allá. Ahora que, primero, yo sostengo que como las miradas no hay nada: previene de la tortícolis de tener el cuello hundido en los apuntes. Y segundo...¿cómo sabes que has establecido conexión con la alumna de Biología, que es la que a ti te gusta, y no con la que estudia Derecho que tiene pinta de ser una siesa?
Pero no hay que tener fobia a la tecnología. Solo se trata de aprender a hacerlo. Sospecho que los que no tuvimos éxito con los métodos tradicionales, tampoco lo tendremos con el Bluetooth. Además el mio está codificado con no sé que clave, con lo cual tendría que levantarme hasta la candidata para soplararle la contraseña...y ya se rempería el encanto de establecer la conexión.
Mi amigo Pablo se va a la bibliteca a estudiar. Yo nunca pude - ni puedo - estudiar en una biblioteca. La razón muy sencilla: me distraía con todo, y más de una vez terminé leyendo libros que nada tenían que ver con el examen, paseando por las revistas y periódicos, o intentando cazar la mirada de alguna compañera de estudio. He de decir que nunca tuve éxito en estas lides. Creo que de haberlo tenido, aún hoy seguiría yendo a estudiar - quise decir ligar - a una biblioteca. Bueno, no, porque eso de madrugar para coger sitio me parece una soberana gilipollez, por mucho que te puedas ligar a la mujer de tu vida ¡Anda que no se estudia bien desde casa! Eso si, ando despistado porque ya no se puede hacer una pausa con Maria Teresa, que eso tenía su aquel...
Decía que mi amigo Pablo se va a estudiar a la biblioteca. Allí se ha encontrado con un cartelito pidiendo a ciertas feminas que dejen de llevar tacones. Dejando de lado los problemas de convivencia que causa los tacones, lo que me ha llamado, tal y como te comenté, amigo Pablo, es que tengas el bluetooth enchufado, "por si acaso". Sospechó yo que el Bluetooth es para que se pueda ligar con la que está dos asientos más allá. Ahora que, primero, yo sostengo que como las miradas no hay nada: previene de la tortícolis de tener el cuello hundido en los apuntes. Y segundo...¿cómo sabes que has establecido conexión con la alumna de Biología, que es la que a ti te gusta, y no con la que estudia Derecho que tiene pinta de ser una siesa?
Pero no hay que tener fobia a la tecnología. Solo se trata de aprender a hacerlo. Sospecho que los que no tuvimos éxito con los métodos tradicionales, tampoco lo tendremos con el Bluetooth. Además el mio está codificado con no sé que clave, con lo cual tendría que levantarme hasta la candidata para soplararle la contraseña...y ya se rempería el encanto de establecer la conexión.
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lunes, 22 de enero de 2007
No me lo puedo de creer: Alice Cooper jugando al golf,
Oye Alice, no sabía yo está afición que tienes tu al golf. Se agradece que no te hayas puesto maquillaje para salir al campo. Si es que hasta me llevas una gorra Callaway. Yo la tengo en negro y de tipo baseball, que las de visera me parecen un poco ñoñas, aunque a ti te vangan de perlas para recoger toda esa cabellera. Por cierto, me tienes que pasar el secreto para evitar la alopecia.
Cuando he visto tus fotos en el flickr de Qu33n me he quedado alucinado. Y nada, aprovecho para decir que tu canción Poison es una pasada: “una mirada puede matar, mi dolor tu estremecimiento, deseo amarte pero pero mejor no tocarte, no tocarte, deseo abrazarte pero mis sentidos dicen que pare...” bueno, que en español queda muy mal, sobre todo si la traduzco yo, asi que pongo el video de Youtube y que los asiduos a éste blog - unos tres millones según el último EGM, que no está mal Alice, que aqui en España no se lee mucho - lo escuchen.
Por cierto, no estas tu nada mal acompañado en la foto. No hay nada como ser vieja gloria de la música...Todo un fenómeno. Cuando quieras echamos unas bolas...Esto último es extensible Qu33n, la dueña del Flickr, por si cuela y sabe jugar al golf...
Por cierto, no estas tu nada mal acompañado en la foto. No hay nada como ser vieja gloria de la música...Todo un fenómeno. Cuando quieras echamos unas bolas...Esto último es extensible Qu33n, la dueña del Flickr, por si cuela y sabe jugar al golf...
PS: oye Alice, que se me olvidaba: que aquí, los que gobiernan Madrid, una tal Esperanza y un tal Alberto están montando un golf sin licencia en pleno centro de la capital. Con lo que me gusta a mi jugar el golf, pero así no. Que en éste país el golf se está empezando a ver mal, con tanto especulador. La culpa no es nuestra, de los golfos, perdón golfistas, sino de tanto especulador del ladrillo, que por otro lado es el metor de nuestra economía...(y tu dirás ¿a mi que me importa? Pues eso, que lo sepas por si ti invitan a la inauguración)
PS2: El no me lo puedo de creer es una incorrección, lo sé, pero era para darle fuerza al titular. Sino lo he conseguido por lo menos le he metido una patada al diccionario.
PS3: Por si no queda claro en ingles: Photos by Qu33n
PS2: El no me lo puedo de creer es una incorrección, lo sé, pero era para darle fuerza al titular. Sino lo he conseguido por lo menos le he metido una patada al diccionario.
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sábado, 20 de enero de 2007
La hamburguesa
Madrid. Un grupo de chavales se agolpa a la salida de un centro extranjero de enseñanza del british. Hablan en corros, diferenciados por edad y por tribus. Entre el público no tan dispar de la institución británica, se mueven los niños bien de la cremé rancia madrileña.
Nos centramos en un grupo formado por sujetos en la edad esa que limita con la mayoría de edad, y que le hace a uno creerse el Rey del Mambo, cuando todo el mundo sabe que el Mambo es una República presidencialista. Dos son el centro: una pareja de pijos, que podían protagonizar perfectamente el anuncio de una afamada firma con caballo, jinete y maza en la pechera. En su insoportable pijerio pretenden ser extremadamente bellos, con sonrisa profident y pelo alisado, más él que ella y con eso se ha dicho ya todo. Él marca su posesión abrazándola por el hombro, mostrándosela a sus envidiosos amigos, que no dudarán horas más tarde, en su íntima soledad, en recordarla. Ella sabe que sus amigas la envidian, y que a diferencia de los machos de la tribu, no se conformarán con recordarle en la intimidad: en un descuido se pegan el lote con él.
- El otro día salimos de clase y yo tenía hambre. Le dije que por qué no íbamos a tomar una hamburguesas al Hard Rock Café – cuenta el chaval a su pandilla de clones – y me dice – cambiando la voz a su versión ridículamente femenina, pero que, salvo la histeria, se asemeja a la propia – prefiero ir al McDonalds que la comida engorda menos.
Ríen todos, incluida la experta culinaria en dietas de comida rápida. Si, ella también rie, cuando tenía que haberle plantado un taconazo en sus náuticos por haber contado una prueba más de su supina estupidez. Ella, sin embargo sigue riendo, pero, por fin, a la sonrisa le acompaña un gesto que trasluce vergüenza, lo cual muestra que puede haber salvación: ¡se ha dado cuenta de que es el hazmerreír de toda esa panda de clones!
Él, en cambio, aunque sus copias no se hayan dado cuenta, ha demostrado lo imbécil que es: no te has enterado, Borjamari, que ella no puede permitirse una hamburguesa en el Hard Rock, porque no es que engorde su tripita, sino que adelgaza su bolsillo, ya de por si paupérrimo y poco alimentado. Que si, que es pija, pero no rica. Pija, no rica y tonta: esto último es lo que, decididamente, hace que esté con un imbecil como tu. Ya saben: Dios los cría, y ellos se juntan.
Nos centramos en un grupo formado por sujetos en la edad esa que limita con la mayoría de edad, y que le hace a uno creerse el Rey del Mambo, cuando todo el mundo sabe que el Mambo es una República presidencialista. Dos son el centro: una pareja de pijos, que podían protagonizar perfectamente el anuncio de una afamada firma con caballo, jinete y maza en la pechera. En su insoportable pijerio pretenden ser extremadamente bellos, con sonrisa profident y pelo alisado, más él que ella y con eso se ha dicho ya todo. Él marca su posesión abrazándola por el hombro, mostrándosela a sus envidiosos amigos, que no dudarán horas más tarde, en su íntima soledad, en recordarla. Ella sabe que sus amigas la envidian, y que a diferencia de los machos de la tribu, no se conformarán con recordarle en la intimidad: en un descuido se pegan el lote con él.
- El otro día salimos de clase y yo tenía hambre. Le dije que por qué no íbamos a tomar una hamburguesas al Hard Rock Café – cuenta el chaval a su pandilla de clones – y me dice – cambiando la voz a su versión ridículamente femenina, pero que, salvo la histeria, se asemeja a la propia – prefiero ir al McDonalds que la comida engorda menos.
Ríen todos, incluida la experta culinaria en dietas de comida rápida. Si, ella también rie, cuando tenía que haberle plantado un taconazo en sus náuticos por haber contado una prueba más de su supina estupidez. Ella, sin embargo sigue riendo, pero, por fin, a la sonrisa le acompaña un gesto que trasluce vergüenza, lo cual muestra que puede haber salvación: ¡se ha dado cuenta de que es el hazmerreír de toda esa panda de clones!
Él, en cambio, aunque sus copias no se hayan dado cuenta, ha demostrado lo imbécil que es: no te has enterado, Borjamari, que ella no puede permitirse una hamburguesa en el Hard Rock, porque no es que engorde su tripita, sino que adelgaza su bolsillo, ya de por si paupérrimo y poco alimentado. Que si, que es pija, pero no rica. Pija, no rica y tonta: esto último es lo que, decididamente, hace que esté con un imbecil como tu. Ya saben: Dios los cría, y ellos se juntan.
viernes, 19 de enero de 2007
Dos hombres y un destino, y yo sin saberlo
Yo sé de dos que la clavan en el Karaoke, pero en la versión moderna, cantada por el de los rizos y el que fue obrero en su día. Me he quedado patidifuso, anonadado, cuando he visto la versión orginal. No era una horterada actual: en los años 80 la compusó y cantó Miguel Gallardo. ¿Se acuerdan de él? Si, solo tienen que hacer memoria...vamos, más memoria que yo porque no me acuerdo...indocumentado musical que es uno.
jueves, 18 de enero de 2007
¿Mearías en una flor?
Lo que ven es solo un ejemplo de meaderos para hombres diseñados Clark Sorensen. Y hay para todos los gustos, hasta con forma de caracola.
A mi me parece una horterada, pero en caso de urgencia no me importaría hacer uso de esta orquidea. Si en el fondo solo se trata de mear.
En España estos diseños no tendría éxito: ¿dónde pueden dejar sus copas apoyadas los cabelleros mientras hacen sitio a más copas?
En España estos diseños no tendría éxito: ¿dónde pueden dejar sus copas apoyadas los cabelleros mientras hacen sitio a más copas?
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sábado, 13 de enero de 2007
Rocky ha vuelto
En el cine con 60 años, en los dvds más joven. ¿Volverá también Rambo? Pues va a ser que si...
PS: Yo aún no la he visto...
domingo, 7 de enero de 2007
Las rebajas
- ¿Qué tal va esa gripe, hija?
- Bien Papá, mejorando, aunque sigo teniendo fiebre. ¿Qué tal las compras? ¿Te has comprado algo?
- No. No me he comprado nada.
- ¿Y había mucha gente?
- Si...como nunca...pero dónde más había era en la tienda esa de las bragas.
Imagen extraída del flickr de Hipocondriaca
Futbol en Kuwait
Desde que lo descubrí leyendo a Migue Mora, entro todos los días en éste foro ruso. Es altamente recomendable para gente que está en la oficina, horas y horas frente al ordenador, y quiere distraerse un rato sin leer tanto blog, porque hay que entender que una foto cuesta mucho menos verla. En Ziza encontrareís de todo, aviso por si algo puede herir la sensibilidad.
De alli saco estas imágenes de la publicidad que Al Wataniya Telecom hizo en Kuwait el pasado mundial. ¡Pedazo de campaña!
De alli saco estas imágenes de la publicidad que Al Wataniya Telecom hizo en Kuwait el pasado mundial. ¡Pedazo de campaña!
Lemming, o el despropósito cinematográfico
- Vamos a ir a ver Lemming – me comunicó mi interlocutora - ¿Te apuntas?
- ¿Lemming? – dije pensando en esos esclavos del videojuego – vale, me apunto.
Era en versión orginal, asi que me esperaba un par de horas haciendo oído en inglés; pero no: Lemming es una película francesa, que nada tiene que ver con el famoso videojuego.
El guión valdrá para empapelar bocadillos, porque para cine, como que no. El director quiere, a estas alturas de la historia, que nos metamos en la película a base de música inquietante, de esas que preceden al susto. En esta hay musiquita inquietante todo el rato, pero sin rastro de susto. Debería de ponerse en contacto con Iker Jiménez para explicarle como se transmite la tensión con la música.
Lo único salvable de la película es la interpretación de Charlotte Gainsbourg, y solo en algunos momentos. Hace de pija francesa – ya saben blusa clara metida en unos pantalones sin cinturón, ceñidos pero no ajustados – muy bien, pero nada más, porque el guión y la dirección se encargan de que el registro no llegue a más, y quieras que el personaje se suicide a tí te dejen en paz.
Reflexión: dicen que el cine europeo (subvencionado) va mal, ¿pero quién se lee los guiones para dar las subvenciones/coata de pantalla a semejantes bodrios y diarreas mentales? ¿No hay talento en Europa? ¿Para cuándo me subvencionaran la entrada?
¿La recomendaría? Nones; es un despropósito sin sentido de esos que le dan sentido a un reloj mientras estas viendo una película. Corre el riesgo de que se acentúe la úlcera estomacal, al estar pensando que en el rato que dura la cantidad de cosas que uno podía haber estado haciendo.
- ¿Lemming? – dije pensando en esos esclavos del videojuego – vale, me apunto.
Era en versión orginal, asi que me esperaba un par de horas haciendo oído en inglés; pero no: Lemming es una película francesa, que nada tiene que ver con el famoso videojuego.
El guión valdrá para empapelar bocadillos, porque para cine, como que no. El director quiere, a estas alturas de la historia, que nos metamos en la película a base de música inquietante, de esas que preceden al susto. En esta hay musiquita inquietante todo el rato, pero sin rastro de susto. Debería de ponerse en contacto con Iker Jiménez para explicarle como se transmite la tensión con la música.
Lo único salvable de la película es la interpretación de Charlotte Gainsbourg, y solo en algunos momentos. Hace de pija francesa – ya saben blusa clara metida en unos pantalones sin cinturón, ceñidos pero no ajustados – muy bien, pero nada más, porque el guión y la dirección se encargan de que el registro no llegue a más, y quieras que el personaje se suicide a tí te dejen en paz.
Reflexión: dicen que el cine europeo (subvencionado) va mal, ¿pero quién se lee los guiones para dar las subvenciones/coata de pantalla a semejantes bodrios y diarreas mentales? ¿No hay talento en Europa? ¿Para cuándo me subvencionaran la entrada?
¿La recomendaría? Nones; es un despropósito sin sentido de esos que le dan sentido a un reloj mientras estas viendo una película. Corre el riesgo de que se acentúe la úlcera estomacal, al estar pensando que en el rato que dura la cantidad de cosas que uno podía haber estado haciendo.
viernes, 5 de enero de 2007
Teatro: Método Gronholm
Había visto la versión cinematográfica, que poco tiene que ver con esta, salvo la situación: cuatro ejecutivos son reunidos en una sala para hacer la última entrevista cara a conseguir un puesto de alta dirección. Todos ellos bien vestidos, porque son altos ejecutivos. Nadie de Recursos Humanos se presenta; las pruebas les llegan a través de un buzón que da a la sala.
La obra es divertida, te ríes de las sitauciones, de las pruebas que les hacen. Pero, empatía, lo que es empatía con los personajes como que no. Exagerando las pruebas de selección, y llevándolas al extremo, nos olvidamos de las horas que uno puede pasar haciendo test sicodélicos más que psicotécnicos en los que te piden que en 30 segundos calcules la altura de la Torre de Picasso usando como referencia uno de tus pelos.
Tampoco transmite esa desesperación por lograr el trabajo, que si la tienen los que se enfrentan día a día con las entrevistas de trabajo, para promocionarse en la vida laboral, o, más frecuente todavía, para iniciarla.
Los actores están bien. Carlos Hipólito está, como siempre, muy bien, perfecto; Jorge Roelas, lo borda, pero su papel está en el registro al que nos tiene acostumbrados, desde que lo vimos en Médico de Familia; Eleazar Ortiz, forzando un poco la interpretación; y María Pujalte, actriz recordada por ser la secretaria en la serie Periodistas, sustituye a Cristina Marcos. Lo hace bien, salvo que en una o dos funciones más se hará del todo con el personaje.
Reitero: no logra por tanto, esa empatía tan presumida. Pero esto no es culpa de la obra, es tal vez culpa de un servidor.
Reflexión: de alguna manera hay que seleccionar a la gente para los puestos de trabajo, y estos sistemas, como la Democracia, es el menos malo de los que tenemos.
¿La recomendaría? Si, te ríes, pero no te hace reflexionar; esto lo conseguía más la película, más dramática y más real; se notaba que Mateo Gil estaba detrás del guión.
Para que no me hagan ni caso, ayer en el patio de butacas había otro blogger, al que no tengo el gusto de conocer, que opina todo lo contrario que yo. Si es que esto de los blogs es pluralidad, y lo demás es tontería.
La obra es divertida, te ríes de las sitauciones, de las pruebas que les hacen. Pero, empatía, lo que es empatía con los personajes como que no. Exagerando las pruebas de selección, y llevándolas al extremo, nos olvidamos de las horas que uno puede pasar haciendo test sicodélicos más que psicotécnicos en los que te piden que en 30 segundos calcules la altura de la Torre de Picasso usando como referencia uno de tus pelos.
Tampoco transmite esa desesperación por lograr el trabajo, que si la tienen los que se enfrentan día a día con las entrevistas de trabajo, para promocionarse en la vida laboral, o, más frecuente todavía, para iniciarla.
Los actores están bien. Carlos Hipólito está, como siempre, muy bien, perfecto; Jorge Roelas, lo borda, pero su papel está en el registro al que nos tiene acostumbrados, desde que lo vimos en Médico de Familia; Eleazar Ortiz, forzando un poco la interpretación; y María Pujalte, actriz recordada por ser la secretaria en la serie Periodistas, sustituye a Cristina Marcos. Lo hace bien, salvo que en una o dos funciones más se hará del todo con el personaje.
Reitero: no logra por tanto, esa empatía tan presumida. Pero esto no es culpa de la obra, es tal vez culpa de un servidor.
Reflexión: de alguna manera hay que seleccionar a la gente para los puestos de trabajo, y estos sistemas, como la Democracia, es el menos malo de los que tenemos.
¿La recomendaría? Si, te ríes, pero no te hace reflexionar; esto lo conseguía más la película, más dramática y más real; se notaba que Mateo Gil estaba detrás del guión.
Para que no me hagan ni caso, ayer en el patio de butacas había otro blogger, al que no tengo el gusto de conocer, que opina todo lo contrario que yo. Si es que esto de los blogs es pluralidad, y lo demás es tontería.
miércoles, 3 de enero de 2007
El abrigo
- Tienes que comprarte un abrigo. Éste no te abriga nada.
- Sí, tengo que comprarme uno.
- Hija, en Bruselas hace mucho frío.
- Ya..
- ¿Y no tienes otro abrigo?
-Si. Tengo el negro, pero no abriga nada.
- ¿Y qué haces cuando hace mucho frío?
- Voy más rapido.
- Sí, tengo que comprarme uno.
- Hija, en Bruselas hace mucho frío.
- Ya..
- ¿Y no tienes otro abrigo?
-Si. Tengo el negro, pero no abriga nada.
- ¿Y qué haces cuando hace mucho frío?
- Voy más rapido.
lunes, 1 de enero de 2007
Y llegó el 2007
Para mi el año empieza, no ya con las uvas, sino con el concierto de Año Nuevo de la Orquestra Filarmónica de Viena. Zubin Mehta la está dirigiendo de manera soberbia. Un fuera de serie. Suena de fondo el Danubio Azul, y después llegará la mancha Radetzky, en honor al militar de mismo nombre, que además de haber sido un afamado y exitoso militar, fue quien definió por primera vez el término "a la milanesa", para referirse al rebozado de la carne.
Les dejo con la marcha Radetzky, interpretada por la Orquestra Filamónica de Viena, y dirigida por Ricardo Muti. ¡Feliz 2007!
Les dejo con la marcha Radetzky, interpretada por la Orquestra Filamónica de Viena, y dirigida por Ricardo Muti. ¡Feliz 2007!
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