martes, 24 de julio de 2007

Están de atar

En agosto dejaré de trabajar en Gran Vía, porque nos mudamos a un edificio nuevo.

Echaré de menos el paseo desde mi casa, atravesando el barrio de Chamberí, para luego recorrer Fuencarral, hasta llegar a la Gran Vía.

Echaré de menos sobre todo por la gente que me he cruzado a diario en estos últimos meses. El viernes me encontré con esto:


Creo que se me escapa algo: ¿Se trata de una tribu urbana cuyos miembros tienen que ir unidos por unas espsas horteras? ¿Puro aburrimiento? ¿Lujuria (para ellas) llevada a la calle? Sea como fuere, están de atar, con o sin esposas.

4 comentarios:

Ana Asuero dijo...

Pues sinceramente, parece que muy centradas no están estas dos chicas. Me da a mí que esto debe ir de declaración exagerada de amor o de lujuria en la calle como dices.

O lo mismo son dos turistas que no se querían perder la una de la otra por nada del mundo... jajajaja.

Anónimo dijo...

para mi que tienen miedo a perderse.

Cris Lago dijo...

Dios santo, esas cosas no se ven en Cádiz.

Bsts desde la playa guapito!!

Pimkie dijo...

mmmmm... ¿celos enfermizos?

Con lo que te a tí gusta andar, ¿te mandan más lejos?